Al fin alguien hace algo para que Formentera no se convierta en un verdadero infierno. Según he leído hoy en EL PAIS, una ley autonómica va a establecer un tope para la entrada de vehículos en Formentera y otras limitaciones a la hora de circular por la isla. La verdad es que ya era urgente adoptar algunas medidas de ese tipo para intentar minimizar el impacto ecológico en un ecosistema tan delicado como el de Formentera. Los propios isleños estaban matando a la gallina de los huevos de oro, sobre-explotándola y abriendo negocios de alquiler de coches y motos, cuyo número ahora se limitará. Falta ver si esos limites son realistas o simplemente 'voluntaristas'.
La verdad es que era, mejor dicho ES, incomprensible que hasta ahora no se hayan adoptado medidas, incluso drásticas, para limitar los abusos que se cometen en Formentera, unos abusos de lo que, aún sin darse cuenta, serán víctimas los residentes en la isla. Según tengo entendido, en Formentera hay unos 12.000 residentes y casi el doble de vehículos, pero en verano se quintuplica esa cifra, algo que es insostenible. ¿Como se puede permitir que haya más de 50.000 vehículos circulando por una red de carreteras de apenas unos 30 kilometros? La limitacion del número de vehículos en la isla es algo que se debió hacer hace ya muchos años....
Limitar el número de vehículos en Formentera es algo 'de cajón' que ya se tenía que haber hecho hace mucho tiempo. Pero... hay más, mucho más, que se debería prohibir o limitar en Formentera, por ejemplo, el fondeo de miles de yates y barcos de todas clases en sus playas. Además de destruir las praderas de poseidonia, limitan el uso y disfrute de la playa a los sufridos bañistas, y se reconozca o no, contaminan y ensucian el mar.
Los turoperadores han logrado convertir los destinos en basureros y el turismo en un plaga. Nuestras autoridades se darán cuenta de eso cuando ya sea demasiado tarde....