"Ahora no lo prevemos. Ni estamos trabajando en ello ni lo prevemos. Pensamos que con el abanico de medidas que están a disposición de las autoridades de las CCAA es suficiente”. Con estas declaraciones el Ministro de Sanidad Salvador Illa ha desestimado la idea a corto plazo de un confinamiento domiciliario impuesto desde el Gobierno central.
Asturias y Melilla sólo marcan el comienzo…Francia, Alemania, Inglaterra, Italia..marcarán el futuro: confinamiento
No lo entiendo. Al abandonar el gobierno la gestión y responsabilidad con el estado de alarma delegado en comunidades, ahora no tiene sentido que anulen la voluntad de los que sí toman decisiones. No sé si es correcto o no, pero en todo caso la decisión está delegada en las comunidades para que nuestro presidente quede impoluto en esta fase de la gestión. Así lo entendí yo.
Se echa en falta una armonización de medidas para todo el territorio. Unas normas únicas, moduladas según el grado de contagio de la zona y una sanidad unificada. Esto es lo que recomienda la UE y no se quiere hacer, para evitar responsabilidades, aunque los amigos las archivan rápido.
Más que mirar (y responsabilizar) al gobierno (ya sea central o autonómico), va siendo hora que como ciudadan@s vayamos asumiendo nuestra responsabilidad en todo esto. Pongo un par de ejemplos:
- Ayer por la tarde/noche en Madrid, terrazas a "reventar" de gente de copas, sin mascarilla y sin distancias de seguridad
- Parques de niños hasta la bandera de padres y niños. Los padres si, con mascarilla
- Políticos acudiendo a quedadas como la de los premios de otro medio, todo un mal ejemplo para la ciudadania
Lo dicho, a ver si empezamos a actuar con responsabilidad. Si no, no habrá mas remedio que confinarnos. Y estoy segura que hay un termino medio entre poder salir o estar totalmente confinad@s.
Totalmente de acuerdo. El problemava para largo. No es viable que todo el mundo estéconfinado. Toca una mezcla de medidas del gobierno y responsabilidad individual.Y multas ejemplares a quien no cumpla, como ocurre con el tráfico.
La última medida, la más dura, la del confinamiento domiciliario, ha sido dejada en manos de las CCAA. ¿Por qué? Fácil, está vez el "malo" que sea otro y no el gobierno. Así, los conflictos derivados de este tipo de medidas drásticas siempre podrán ser achacadas a los gobiernos autonómicos y no al central. Esto es una guerra de desgaste. Aquí no miramos en hacerlo bien, sino de que parezca que la culpa siempre fue de otro porque los muertos son (desgraciadamente) inevitables.
No entiendo la rabieta de los "proconfinamiento". NO ESTA PROHIBIDO CONFINARSE. Los que son partidarios de ello no tienen que esperar a medidas fascistas de cero legalidad para obligar a todo el mundo. Si tan "puros" son, si tan "responsables" son, seguro que se encerrarán bien, que no tomarán contactos con nadie y sólo se tendrán que preocupar de desinfectar con zotal los suministros a domicilio que reciban. ¿Por qué el empeño de confinar obligatoriamente a los sanos?.
Primera ola: El Gobierno central decreta el confinamiento y la Oposición habla de autoritarismo y debacle de la economía, en cuanto se empieza a hablar de desescalada según mejorabala situación, las Autonomías disfrazan cifras para apuntarse a la misma los primeros, El Gobierno se desentiende, se va de vacaciones y deja en manos de las autonomías toda la gestión.
Segunda ola: Las Autonomías niegan su gravedad y proponen cierres perimetrales o "quirúrgicos" (¡qué bien suena eso!) Estos innovativos cierren no sirven de nada (la realidad lo demuestra), los casos crecen y se llega nuevamente al colapso: Las autonomías piden confinamientos estrictos y el Gobierno los niega ahora….¿¿???.
El confinamiento domiciliario no es la solución como ha quedado archidemostrado en la primera ola. Solo causa frustración, destruye empleos y deja secuelas en niños y mayores. Y menos si luego no hay un plan de desescalada, como no existió en junio. Mi humilde visión es que prevención toda, miedo poco. El peligro está en las reuniones familiares y sociales, donde se produce el 60% de los contagios y en los inmigrantes que llegan a miles contagiados y propagan la enfermedad. Los colegios/institutos están funcionando bien, y si hay un contagio la trazabilidad es muy sencilla. Las Universidades tienen bien repartidas las clases presenciales y las telemáticas. Otra cosa es que hacen los universitarios por las tarde-noches. Vamos a vivir mucho tiempo con el virus y hay que hacerle frente y no con confinamientos domiciliarios precisamente.
Las medidas que toman son básicamente confinamientos y restricciones a la población para que la gente se culpe así misma de la situación, si hemos llegado aquí es por culpa de la población... Además siempre lo aderezan con noticias sobre casos de gente que se salta las restricciones...Pero ¿qué hace el gobierno para parar el virus? ¿Qué medidas sanitarias han tomado? ¿Qué medios han puesto para la gente que no cumple las restricciones?
Es un buen momento para releerLa máscara de la muerte roja, de Poe, que trata exactamente de esto. No es un problema científico: a estas alturas, se va sabiendo qué retrovirales y qué antiinflamatorios mejoran el pronóstico de los pacientes graves. Y dentro de no mucho habrá una vacuna. Pero el bicho se adapta perfectamente al modo de vida de su anfitrión. Su anfitrión es unzoon politikon. Es un problema sociológico. La pandemia cuestiona nuestra forma de vida y no queremos perderla. Por lo demás, es un problema tan del primer mundo que duelen los ojos
Siento la crudeza. Me enerva que se haga política barata con esto del confinamiento, que es algo muy serio, por el drama de pérdidas de vidas que esconde y por la ruina económica que trae.Ahora, releyéndome, me parece que no he sido muy sensible con las personas asustadas, cuyo últimorecurso es negar la realidad. Mil perdones
Si hace dos días el gobierno ha dado un estado de alarma de 6 meses, habría que esperar un mínimo para ver si da resultado. Las autonomías lo pueden bajar de las 23 a las 22 horas. Pero todo el mundo sabe que, en gran parte, la dispersión del virus se debe alos botellones, fiestas, etc. y esta medida podría aplanar la curva.