Hoy se ha dado el pistoletazo de salida a la Ley de la Infancia. Como maestra, he tenido que seguir el tema desde que la presentó Pedro Sánchez en 2018 y en su mayor parte no ha sufrido modificaciones de fondo, pero sí algunos toques para que los socios de UP dejaran seu huella. De los que me han parecido más relevantes:
-Se generaliza el deber de comunicar cualquier situación de violencia sobre niños, niñas o adolescentes a la autoridad competente aun cuando no sea constitutiva de delito (especialmente para nosotras las profes).
-Aumenta el plazo de prescripción de abuso sexual y empezará a contar cuando la víctima cumpla 30 años.
- Nuevo catálogo de delitos contra menores y adolescentes cometidos a través de internet, que incluye la inducción al suicidio
De primeras, no me parece mal que se refuerce el sistema de alerta y proacción si se sospecha y comprueba abuso, pero está claro que es un tema muy espinoso siempre, con el que se debe ir con mucho cuidado.
Mira, fiarse de Podemos para regular a los sectores primarios más vulnerables (mujeres, niños y adolescentes) y "protegerlos" ante lo que ellos dictaminan que es "violencia", ya me parece peligroso. Pero dejar que la aprueben cuando aún los casos de abuso sistmático promovidos por el Instituto social Mallorquín en connivencia con el gobierno PSOE, PODEMOS, y la marca blanca de ERC, Més per Mallorca.
La prostitución de menores tutelados, los más vulnerables de todos, mercadeados por algunos y tapado por TODOS. Un gobierno, el de Armengol, cuyo ex-marido está metido hasta el cuello y que fue una de las razones por las que se ha retrasado e intentado encubrir todo esto. Cuando sepamos de verdad qué ha pasado y permitan investigar libremente, hablamos del resto de los niños y de cómo protegerlos de la violencia.
Adoctrinamiento forzoso, eso es lo que nos espera. Con esta ley Estado se arroga unas capacidades sobre los hijos que antes no tenía creando un estado de permanente delación: el ecosistema clásico comunista. Lo mismo que han hecho con las mujeres
Habrá miles de denuncias por envidias, odios o pensamientos diferentes. Cualquier sospecha de "heteropratriarcalización" de los niños, en especial todo aquello que no le guste a la izquierda será tachado de "radical" o "delictivo". Me imagino que intervendrán Servicios Sociales en los casos en el que el niño siga teniendo ideas propias y no ceda a ser de izquierdas... ya veo hasta retirada de custodias y una "tutela liberatoria" por el Estado para "rehabilitarlos" mentalmente.
Baste decir que la estrategia de la delación funciona sólo si has enfrentado a todos contra todos. Con la Ley de violencia de género se enfrenta a hombres contra mujeres. Con la ley de la INfancia se va a enfrentar a los padres y a los hijos. Y que el Estado, cada vez con más tentáculos y formas de intervenir en la vida privada de personas y familias, intervenga y ordene la vida privada de las personas. Sólo así se puede controlar de verdad la vida pública de todos nosotros.
No me parece que, precisamente este, sea un tema para dividir y enfrentar. Estamos hablando de un Anteproyecto que encesitaba nuestro país y así nos lo reclamaba la ONU. Es, por definición, una ley de consenso que comienza en 2015 bajo un gobierno de PP y se aprueba bajo un tan distinto como este. Es una de las pocas leyes que pueden concitar un consenso amplio y que ha obligado a que muchos partidos renuncien a sus posiciones estratégicas electoralistas.
Los beneficios y correcciones a nuestra dejadez pasada en materia de protección de niños es de los avances sociales más importantes. Esta ley es profundamente necesaria y, sinceramente, a mi me ha reconciliado por un rato con la política. Una Ley Itegral que, además, amplía el caso de prescripción: a la luz de los casos destapados estos años, el menor tarda de media 20 años en reconocer y asumir el abuso (la del PP incluso contemplaba que empezara a descontarse a partir de los 45). Aprobada por ONG's y asociaciones de abogados por igual...
Recordemos que un maltratador podía llegar a tener la patria potestad de su hijo. Fuera de la educación pública, era de uso corriente no investigar los antecedentes a adultos que iban a trabajar con niños. Ojalá tengamos más leyes que demuestren a los ciudadanos que los políticos pueden cumplir sus responsabilidades como gobernantes de todos.
Leyes, que al fin y al cabo, todas encuentran la misma dificultad: registros por comunidades, descentralizados, descoordinados y sin registro único, ni para tutelar la víctima ni perseguir al victimario por el conjunto del país. Hasta ahora ni teníamos una contabilidad total sobre algo tan crítico como los abusos a los niños.
Muchas de las reformas de esta ley se ve que vienen de expertos y conocedores del tema para hacer más llevadero este trauma a los niños/as.
En España sobran leyes y falta un sistema político y de Administración de Justicia que funcione. Con la Administración de Justicia que tenemos las leyes casi dan igual. Los jueces se limitan a ser burócratas que cubren expedientes y la Justicia les trae sin cuidado. Es una burocracia y una lotería. Si un tribunal te quita la razón apelas y el siguiente te la dará. Ni los jueces se ponen de acuerdo. Lo dicho, una burocracia, una payasada y una lotería de azar. Las leyes son lo de menos porque la realidad es que las leyes se incumplen por todos, empezando por el propio Estado y sus organismos. Una vergüenza y una pena. Y una tragedia para muchos que lo sufrimos.