Hay que recordar que en su día Puigdemont se comprometió retiteradametne a regresar a España si los independentistas sumaban mayoría
para ser investido presidente.
Por eso los de ERC dicen ahora que si Puigdemont no vuelve, el nuevo presidente debe ser Junqueras.
Ya se acabó la amistad y el coleguismo. Ahora, cada uno a salvar su trasero.
Lo de ERC se entiende. Junqueras hará lo imposible por salir de la cárcel, tomar posesión de su acta y tratar de ser investido presidente de la generalitat. El otro, el fungado Puigdemnot, si se le ocurre presentarse en España, va al trullo en primera instancia y por eso no vnedrá.
Puigdemont es un cobarde y no volverá a Cataluña porque sabe que antes de tener la oportunidad de comparecer y ser investido president lo van a meter en el trullo, que es lo que se merece por haber montado el pollo que montó y causar tanto daño a España y en especial a todos los catalanes