Permítanme distraerles de la batalla para contarles una breve historia. Debo aclarar que no tengo nada en contra del muy realizado señor Ortega, ni tengo información suficiente como para dudar de los métodos de financiación de los inicios de su imperio.
En 1989, mientras Zara desembarcaba en EEUU, su contracara en el mundo textil, Douglas Tompkins se retiraba del mundo de la industria textil, desencantado por el impacto que estaba teniendo sobre el mundo y sobre el planeta. Ya desde 1971 Tompkins se dedicaba a supervisar las condiciones de las fábricas de sus proveedores asiáticos y siempre estuvo consternado por las condiciones de trabajo y la permisividad del gobierno chino.
Hoy en día, mientras Ortega es uno de los mayores inversores inmobiliarios en Europa, el otro se ha ocupado de comprar, preservar, promover y finalmente donar algunos de los parques naturales más importantes del mundo sitos en Chile, Eustados Unidos o Argentina.
Las comparaciones son odiosas, pero el endiosamiento también. Evitemos los excesos
Criticar a una empresa que da de comer a 176000 familias en una época en la que nos falta a todos, no me parece lo adecuado. Usar datos objetivos para echarle en cara algo a alguien que nunca se ha vanagloriado de serlo, como Amancio Ortega y su generosidad, no es viable. Como seguro que los que critican nunca han tenido un negocio, no tendrán en cuenta todos los costes adicionales de adaptar sus tiendas a las medidas de sanidad, cursos de formación para empleados, inversión en la venta online....es un gigante, pero también tiene derecho a retocar su modelo para pensar, al fin y al cabo, en ganar más.
Estimada Laura, creo que deberías empezar a cuidar tus fuentes de información. Si le dedicas un par de minutos más a los 10 segundos que has tardado en reflexionar sobre el tema, le puedes echar un vistazo a esto: https://cincodias.elpais.com/cincodias/2020/06/10/companias/1591771273_885518.html
Como se explica en el artículo, no habrá destrucción de empleos, sólo cambio de estrategia reduciendo costes de las tiendas menos eficientes: "Las plantillas permanecerán estables y, al igual que a lo largo del periodo 2012-2020, se ofrecerán nuevos puestos a todos los trabajadores de los establecimientos absorbidos, para cubrir las nuevas necesidades generadas por la integración online y los envíos individualizados a clientes".
no seré yo quien cuestione la brillantez de este hombre, pero me da a mí el "coste patrótico" de la pandemia reacaerá sobre los más de 1000 empleaos que despedirán el año que viene. Realmente alguien se traga que este hombre ponga pasta de su bolsillo? Que paguen sus accionistas? No sé, a mí no se me olvida que sus fábricas están en países como Marruecos, Portugal, Pakistán, CHina....me parece que tiene mucho que perder si se presenta como un héroe patrio este anciano
Qué bonita la historia de Inditex: nuestro milagro español y mayor orgullo. Un joven que empieza vendiendo batas puerta a puerta y su éxito acaba siendo estudiado por Harvard. La pena es que algunos pensamos que Harvard no se ha enterado sobre las fuertes sospechas de que este señor empezó lavando dinero del narcotráfico cuando no se perseguía como ahora.
Hoy en día el punto principal de entrada lo sitúan en Irlanda. Curiosamente un país que alberga otro milagro de la distribución: Primark. Casualidad, no?
Inditex destina 300 millones entre salarios y donaciones por el covid19 sin hacer erte
Cuanto más aciago sea el panorama político más tendrán que prender los que de verdad valen. A las maas, lo llevamos aprendiendo durante toda nuestra historia. Como decía Borges: "eso de la envidia es muy española, ustedes la mentan en exceso". Por algo será. SIn embargo, el mejor ejemplo es el que se da sin sermones previos sino con acciones y buen hacer. Por algo a Inditex se la estudia como modelo de negocio en las mejores escuelas del mundo.
Una empresa que no ha dudado en ponerse al servicio del país cuando más lo necesiaba, a pesar que su vicepresidente intentara burlarse y desmerecer el compromiso de este hombre. Han sido capaces de ajustar la producción de forma rapidísima, protegiendo el margen bruto sin ampliar inventario. Y renunciando a ganancias netas no participando de ningún ERTE.