Según el portavoz de la Asociación Madrileña de Salud Pública, Fernando García, son 3 los pilares básicos para controlar la epidemia: 1) El diagnóstico en atención primaria; 2) El rastreo en salud pública para mantener a raya la propagación y 3) La vigilancia epidemiológica para contar con cifras reales que permitan tomar decisiones acertadas.
Según los informes que publicaba el Ministerio de Sanidad en cada cambio de fase, , Madrid pasó a la fase 2 con el compromiso de contratar a casi un millar de sanitarios en los centros de salud y más de doscientos profesionales para el área de Salud Pública, desde donde se realizan los rastreos. Pero según sus propias cifras, hasta finales de julio sólo contrató a un centenar de sanitarios y 182 profesionales para el área de salud pública.
Si la media nacional es de un rastreador por 12.000 habitantes, cuando lo óptimo estaría en uno por 5.500, Madrid ha admitido a finales de julio que cuenta con uno por cada 47.000.
Esto sucede cuando, entre otras cosas, se prefiere montar un hospital para posibles enfermos en otoño que prevenir los rebrotes. Ahora sabemos que el Gobierno de la Comunidad, cuando presionaba para pasar de fase, lo hacía a sabiendas de que no cumplían ni iban a cumplir con los requisitos mínimos.
No me sorprende. En Madrid conocemos que hay más de una veintena de centros de Atención Primaria cerrados por falta de personal, cuando tenemos 22 brotes activos. Y ya no es sólo que estén cerrados sino que los que están abiertos sólo atienden por teléfono y encima por la tarde cierran. Prefieren derivarte a un hospital que ejercer una labor proactiva de contención y descompresión de los centros sanitarios. El razonamiento lógico de la presidenta sigue, aún hoy, confinado.
Y la prueba de que no se han hecho las cosas muy bien, es el corte total de los "chascasrrillos" que nos han brindado los Egeas and company durante lo más duro, presumiendo y contraponiendo su "excelente gestión", cuando, como se ha comprobado, no hacían nada provechoso, salvo lloriquear por el trato recibido.
Gran parte de culpa la tiene el Gobierno Central con sus nulas medidas para evitar la llegada de contagiados por aeropuerto. Cada día pueden estar entrando alrededor de un centenar de positivos que, lógicamente, hacen aumentar los rebrotes en una Comunidad objeto de odio y envidia por parte de muchos. Pero todo eso nos lo pasamos por la Puerta de Alcalá.
Hombre, claramente usted ha dado en el clavo. No es culpa de la gestión del gobierno de Ayuso..qué va! Todo es culpa de Barajas y de que los malvados bolivarianos no hacen PCRs en el aeropuerto. Que los ambulatorios estén cerrados, es sólo una nota al pie sin importancia. Que no haya rastreadores, un pequeño problema de gestión. Que haya 1000 profesionales menos de los necesarios en la sanidad madrileña y los médicos estén en huelga, cosas de rojos.
Para poder echarle la culpa al Gobierno Central tendrían que haberles quitado gran parte de las competencias y ya vimos cómo se pusieron los presidentes autonómicos...Todos decían ser capaces de hacerlo mucho mejor cuando existía el mando único. A ver si nos enteramos de que vivimos en un Estado autonómico y de que cada cual se tiene que responsabilizar de lo que hace, ahora bien en Madrid con Díaz Ayuso de presidenta y Miguel Ángel Rodríguez de asesor...Qué quiere qué le diga, siempre estarán discurriendo cómo zancadillear al Gobierno antes que asumir su responsabilidad.
Nuestra querida Presidenta se pasa por las horcas caudinas sus promesas y le trae al pairo nuestra salud. Su único interés (el mismo que ocupó a los gobiernos de sus antecesores) es que todo se degrade hasta el punto que pueda justificar la privatización de la Sanidad (y de la Enseñanza, ya que estamos, puesto que allí hacen lo mismo). En su ignorante arrogancia sabe que puede contar con un ejército de cómplices (sus votantes) que no oyen, no ven y no sienten. Si el PSOE de Madrid fuera una agrupación normal y no una jaula de grillos que lleva mirándose el ombligo desde hace decenios, otro gallo cantaría.
Hay quejas sobre Ayuso por su inutilidad para detener el aumento del 400% de los contagios. Es normal. se dedica a la propaganda con su cartillita y hace anuncios sobre contrataciones de rastreadores que nunca ha tenido intención de cumplir. Sólo le interesa el ladrillo. La pregunta es ¿quién la ha puesto ahí? Sin duda los votantes que prefieren el ladrillo a la sanidad pública, por mucho que digan lo contrario en las encuestas.
Nos quejamos de los políticos y de su falta de compromiso con la sanidad pública, lo cual es tradicional en la derecha de la banderita y en la derecha soberanista ( léase Torra y similares). Pero los votantes dan la cuarta mayoría absoluta a Feijoo, dan el gobierno a la derecha del PNV y se lo darán a Torra y compañía. Al 50% de los votantes no les importa lo público, empezando por la sanidad y siguiendo por la educación, la dependencia, etc. Y sacan aquí y allá sus banderitas de colores y su patriotismo-olé. Lo único que se echa de más es la hipocresía, las banderitas colgadas y los aplausos vacíos.
Si la pandemia dejó su peor rostro en Madrid capital esquilmando a los mayores abandonados y sin poder ingresar en los hospitales , ya sería desgraciado que la historia se volviera a repetir por culpa de la falta de rastreadores. Si en España hay asintomáticos y portadores del covid, hay que hacer más pruebas de PCR y reforzar nuevos equipos y al personal sanitario para que no nos vuelva a pasar lo del mes de Marzo. La sanidad madrileña ya falló durante el confinamiento y la Consejería demostró sus carencias e incompetencias , sin asumir dimisiones. Sólo espero por el bien de todos que no vuelva a pasar. El incumplimiento de lo pactado y demandado por el Alto mando sanitario es realmente alarmante.
A este paso, no tardará mucho Madrid en ingresar en la lista de regiones europeas poco recomendables para visitar. Ayuso que llegó a quejarse -fingidamente airada- de que no estaba dispuesta a que "Madrid fuera la apestada de la pandemia", poco está haciendo por evitarlo, ahora que depende de ella y del gobierno que preside.
Esto sólo es una gestión de inútiles sin escrúpulos, perdidos por haber quitado de en medio a través de dimisiones a los propios expertos comprometidos con el tema que no le bailaron el agua. La prioridad no es controlar la pandemia, que requiere colaboración e inversión sanitaria, la cuestión es tapar la degradación sistémica, que ha tenido una política indecente del PP durante décadas, para beneficiar amigotes de la privada con el objetivo de deteriorar lo público, haciendo creer que no puede funcionar bien.
Estoy de acuerdo con usted. El personal sanitario, los trabajadores de servicios esenciales, los cuerpos de seguridad tendrán mi agradecimiento eterno por haber cumplido en condiciones de insuficiente dotación y protección. Esto de "eterno" lo digo con precaución, claro, porque vivo en Madrid y de Madrid al cielo... no hay más que un paso, vista la incapacidad de gestión de su gobierno regional.