Las leyes ecológicas y medioambientales en vigor ahora mismo se miden por miles . Se ha pasado de aprox 75 a 1.500 leyes en unos pocos años.
Esto plantea enormes dificultades a las empresas, incluso a las más comprometidas con el medio ambiente. Además de éste problema de pluralidad numérica tbm está el problema de la pluralidad de fuentes normativas; internacionales, de la UE y Estatales. En España además provienen de gobiernos y organismos autonómicos llegando a algunos Ayuntamientos... Esto supone una locura e inseguridad para las empresas y repercute incluso en la inversión (aún más en inversión extranjera) pues las sanciones llegan en mitad de ese caos, incluso las penas de prisión, pues así se establece para delitos medioambientales...
La única manera de que resulten eficientes es la regulación de modo ordenado y uniforme, quizás desde la sede europea resulte lo más lógico, esperemos sea tenido en cuenta en algún momento.