El asunto debería de estar en manos única y exclusivamente de científico y experto en la materia, sin excepciones. Parece que somos 17 países en uno con fronteras imaginarias y protocolos de actuación imaginarios.
Critiqué con dureza a Casado cuando se abstuvo en la última votación del estado de alarma. Lo peor que puede hacer un político en una situación como ésta es ponerse de perfil. Que tomen las decisiones que tengan que tomar y que lo hagan en conciencia, eso es lo que le pido a quien nos gobierna. Si se equivoca, que asuma las consecuencias (es lo que tiene la política). Lo que hace ahora Sánchez es igual de cobarde que lo que hizo casado en su momento y es la constatación de su fracaso. Es evidente que no tiene ni idea de lo que hacer (ya tuvo su fracasado estado de alarma) y ahora se quita de en medio. Lamentable.
Está muy claro que este Gobierno actúa otra vez tarde. No hay ni una Administración sea Gobierno Central o CCAA, que haya actuado con previsión. Para ésto ha hecho falta llegar a final de verano? A que haya transmisión comunitaria? Unos más que otros, con distintos estilos y formas, pero en éste Estado decadente, la clase política en general, antepone sus intereses partidistas al buien común, incluyendo la salud. Se han pasado todo el verano con el cuento del campechano para no dar palo al agua…
Sánchez noha descargado la responsabilidad en las CC.AA., más bien les ha recordado que los presidentes de cada una tienen la posibilidad, si lo creen conveniente, de solicitar al Gobierno que decrete el Estado de Alarma, total o parcial, en sus territorios. No es un ofrecimiento del Gobierno, eso es un derecho previsto en el artículo quinto de la Ley Orgánica 4/1981 de 1 de Junio que, asimismo, desarrolla el art. 116.2 de la Constitución. Lo que pasa es que a las comunidades no les interesa. Es más fácil que gestione la pandemia el Gobierno Central y ellos solo tengan que pedir responsabilidades a los demás. Estrategia política pura y dura.
Lo de ofrecer el ejército como rastreadores y dar la opción a las comunidades de dirigir el estado de alarma en municipios concretos en casos muy puntuales, no sólo es adecuado sino que llega dos meses tarde. Respecto a los presupuestos a Sánchez se le ve el plumero. Ya anda buscando excusas para girar a la derecha.
El drama que tenemos en este país es la completa politización de la lucha contra la pandemia. Aunque una Comunidad necesite recurrir a la declaración del estado de alarma, no lo hará mientras haya el suficiente número de futuros votantes que continúen con la letanía de Gobierno Asesino.
Aunque el precio de esa negación tenga coste en vidas humanas, serán contabilizados como efectos colaterales en esa particular batalla para derribar al “ilegítimo gobierno” de la Moncloa.
Los ciudadanos nos encontramos entre el gobierno de coalición y la coalición de oposición formada por el PP y el Covid-19.
“El Estado de las Autonomías o del caos”, este es el gran invento constitucional que se pactó en 1978 para contentar a nacionalistas catalanes y vascos; contando con la ayuda, más o menos encubierta, de socialista y comunistas, y la débil oposición de los centristas. El desmantelamiento del Estado ha sido gradual y escalonado, pero llegados a este punto sus autores ya se quitan la careta y admiten la capacidad de las cc.as. para determinar sus estados de alarma territoriales. Ofreciendo a Sánchez una nueva etapa en el camino emprendido por esa desgracia política llamada Rodríguez Zapatero.
A buenas horas mangas verdes , después de su bronceado en su largo verano en el Palacio de la Mareta y en el Cortijo de Doñana y después de que el pasado cuatro de julio en la ciudad de La Coruña, Sánchez exultó dando por "VENCIDA la pandemia" y asegurando que el virus ya estaba “controlado”. Ahora comprobamos que ni la pandemia fue vencida ni ha existido reactivación económica alguna.
Sánchez descarga en las ccaa la decisión de solicitar el estado de alarma.
Aunque el propio Gobierno puede tomar esta decisión de manera territorial, y no en toda España como sucedió en marzo,Pedro Sánchezquiere que sean los presidentes autonómicos quienes afronten esta responsabilidad y pidan este mecanismo al Ejecutivo. En ese caso, ellos serían el mando único y quienes comparecerían ante elCongresopara reclamar la aprobación del estado de alarma y las prórrogas necesarias.
Sánchez, que se remitió a una ley de 1981 que contempla que una comunidad podría pedir la declaración del estado de alarma en caso de pandemia, garantizó el voto de los dos partidos que sustentan al Ejecutivo (PSOE y Unidas Podemos) para dar su respaldo a todas aquellas comunidades autónomas que lo soliciten en la Cámara Alta, "independientemente de cuál sea su color político”. Asimismo, el Presidente informó que dispondrá de 2000 efectivos de las FF.AA. para hacer labores de rastreo en las Comunidades que los soliciten, así como incentivó que las a que incorporaran el uso de la aplicación de rastreo Radar Covid, ya aceptada por 7 regiones.